Por fin he podido degustar (y nunca mejor dicho en esta ocasión) la tercera pieza de La colección secreta de Pseudonymous Bosch, una serie de cinco libros en los que cada uno versa sobre un sentido y en los que se esconde un Secreto muy grande. Ya hemos visitado el olfato y el odio en los dos primeros volúmenes, y en esta ocasión llego el turno del gusto. En esta nueva aventura nuestro querido narrador nos contará como la madre de Cas ha sido secuestrada por el siniestro chocolatero el Señor Hugo; como Cas, Max-Ernest y Yo-yoji en embarcarán en nueva investigación para intentar rescatarla y como siempre, lucharán contra los malvados integrantes de El sol de medianoche que estarán metidos en medio de todo el asunto.

Ha sido el mejor volumen de los tres leídos hasta ahora, ya que es el volumen más equilibrado de todos. Aventuras, misterio y desarrollo de nuestros protagonistas están en bueno armonía para hacer que no te despegues de sus hojas ni un momento. Ayuda también nuestro querido y misterioso narrador, el cual como siempre sigue interaccionando con nosotros y desata todo su amor por el chocolate en este libro, y de paso te da bastante hambre. Capítulos cortos con finales totalmente cliffhanger hacen que no sueltes el libro de fácil manera.

En este libro ademas tocaremos temáticas como los problemas a los que se enfrenta una madre cuando su hija se entera de que es adoptada, como vive un hijo la recuperación en la relación de sus padres divorciados o exploraremos un poco en la identidad de cada uno de ellos. Y bueno hablara de chocolate, cantidades ingentes de chocolate y algunas cosillas interesantes sobre el tema. Como en los anteriores entregas Pseudonymous nos agregará notas al pie de página con detalles explicativos que nunca vienen mal, yo siempre descubro un par de cosas gracias a él. Una nueva y misteriosa aventura que nos sigue dejando con ganas de más, sobre todo por que seguimos sin saber que es el dichoso Secreto. Espero que tengamos pronto la cuarta parte.