3.5 estrellas.

Este libro es entretenido, único y dinámico, razón por la que entiendo por qué a la gente en general le guste tanto y que haya conseguido una adaptación cinematográfica tan rápido.

Entonces, ¿por qué no me cuento entre su fanbase? Simple: a pesar de todos sus atributos, la sentí como una gran paja de fanboy en forma de novela; todos los elementos que componen el libro se me hicieron como la fantasía de un nerd frustrado. Que no tiene por qué ser malo, sobre todo tomando en cuenta lo bien ejecutada que está esta historia, pero para mí, que no entendí la mitad de las referencias, se me hizo un poco (como dicen los gringos) "eyeroll worthy".

Al final, todo se resume en que yo no soy el público al que iba dirigido Ready Player One; no soy gamer ni una gran seguidora de la cultura nerd ochentera. A pesar de eso, sí lo pasé bien leyendo y recomiendo infinito esta novela a toda persona que sí encaje en esta descripción, porque van a gozar.